yo misma
te puse un diploma
de verdugo en las manos
y después me interné
por la frente helada
de tu voz
como si fuera una autómata
una aprendiz alerta
a tu menor pronunciación
después
llovió durante noches
y hubo monstruos fabulosos
y un primer plano sin respuesta
a orillas del odio
y todo eso ocurría
en el hogar común
de las palabras
a orillas de un río tenebroso
"por favor
nada de angustias"
el desierto es un animal
ávidamente inconcluso
y la luz
un desierto
ávidamente más grande
que el desierto
cuando la noche se encrespa
la sombra escribe en el lomo
de esas arenas suntuosas
el desierto medita
aparte de eso
sólo es visible aquello
que está adentro de la visión
tantas vueltas de
piel de toro
tantas chapas de
hierro y bronce
no
protegen
el viento vuelve a
traer
su carga de antiguas
culpas
¿en qué nombre del
alma
soy yo la
abandonada?
¿en cuál la que
abandona?
toda navegación
instaura
el río que la
lleva
así en la
huída
así el pájaro
ingrato
obsesionado por tus muros
en un
rincón
lo que termina de
morir
en el otro
lo que no termino de matar
(porque esa rabia es
todo lo que tengo)
el poema hila el
silencio
entre dos casas
ojalá me tuvieras
encerrada
en la noche del
exilio
me
acunaras
para poder
morir
antes de
morir
eso dije
después
pregunté
¿qué exilio? ¿de qué
noche?
¿cómo podria acunar
la muerte?
después
tu cuerpo fue el
exilio
y la
noche
y la canción de
cuna
imposible
morir
en tanta oscuridad con lámparas
María Negroni nació en Rosario.
Tiene un doctorado en Literatura latino americana en la Univ. de
Columbia.
Publicó en poesía: "de tanto desolar"(1985), "La jaula bajo el trapo"(1991), "Islandia" (Monte
ávila 2001), "El viaje de la noche"( Lumen 1994), "La ineptitud" ( Alción 2002)
y "Arte y fuga"(Pre-textos 2004). En ensayo:"Ciudad gótica "(1994), "Museo Negro
"(Norma, 1999) y "El testigo lúcido"(Beatriz Viterbo 2003).
Obtuvo, entre otras,
la beca Guggenheim(1994)